El presidente colombiano, Gustavo Petro, aseguró la noche del martes que una invasión de EE. UU. contra Venezuela convertiría a la nación caribeña «en otra Siria», conflicto que, dijo, arrastraría también a su país.
«Los gringos están en la olla si piensan que invadiendo Venezuela resuelven su problema, (y con eso) meten a Venezuela en el caso de Siria, solo que con el problema de que se arrastran a Colombia a lo mismo», expresó Petro durante un consejo de ministros, según lo reseñado por Caracol.
Según el mandatario, los norteamericanos irían «a apoderarse de las riquezas del subsuelo, minerales, y eso significa más economía para la muerte, no para la vida».
Por eso, acotó lo siguiente: «Yo le dije a Trump, a través de sus emisarios, que eso sería el peor error». Al mismo tiempo, subrayó que «no es como la prensa dice que entonces somos aliados de Maduro. Yo voy a pasar aquí y Maduro va a pasar, cualquiera que sea el año», refiriéndose a la salida del poder.
Sobre su cierre de mandato, añadió: «El mío está fijado por la Constitución, entonces nosotros nos vamos el 6 de agosto y el 7 ya salimos de aquí».
Por otro lado, abordó unas supuestas declaraciones del ministro de Interior, Diosdado Cabello, sobre que no hay paramilitares en suelo venezolano. «Diosdado (Cabello) dice que en Venezuela no están, (pero) sí están. Yo lo que he hecho es invitarlos a sacarlos, coordinando», puntualizó.
En contexto
La reacción de Petro ocurre en un contexto de altas tensiones entre Venezuela y EE. UU. y después de que tres destructores estadounidenses equipados con el sistema Aegis, una tecnología de defensa diseñada para rastrear múltiples objetivos y neutralizar amenazas aéreas o marítimas de forma simultánea, se posicionaran frente a las costas de Venezuela.
El operativo forma parte de un despliegue militar contra organizaciones de narcotráfico en América Latina, y cuenta con alrededor de 4.000 marines en la región del Caribe, además de aviones de vigilancia P-8 Poseidon, varios buques de guerra adicionales y al menos un submarino de ataque.
Cabe recordar que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien asumió el poder en enero, ha buscado utilizar a los militares para perseguir a las bandas de narcotraficantes latinoamericanas que han sido designadas como organizaciones terroristas globales. El Pentágono recibió instrucciones de preparar opciones al respecto.
Trump ha hecho de la represión de los carteles de droga un objetivo central de su administración, como parte de un esfuerzo más amplio para limitar la migración y reforzar la seguridad en la frontera sur de Estados Unidos.
Entre los grupos designados se encuentran: el Tren de Aragua, la Mara Salvatrucha, el Cártel de Sinaloa, el Cártel de Jalisco Nueva Generación, los Cárteles Unidos, el Cártel del Noreste, el Cártel del Golfo y La Nueva Familia Michoacana.
Asimismo, el martes la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, aseguró que Trump está dispuesto a usar «todos los elementos del poder» para impedir que «las drogas inunden» su país.